¿Cómo saber si mi pareja es infiel?

Si bien es muy difícil trazar en líneas generales los indicios que pone de manifiesto alguien que engaña a su pareja, sí existe una tendencia marcada. Por supuesto, las actitudes que vamos a detallarte sólo se convertirán en una verdadera señal de alarma si se producen al mismo tiempo y durante un lapso prolongado.

¿Qué pasa si tu marido recurre frecuentemente a estas excusas? Observalo. Un mes de mucho trabajo, de largas horas fuera de casa y de poca actividad sexual a causa del estrés no debe confundirse con infidelidad. Lo mejor, en todos los casos, es prestar atención y conversar si:

• notas una preocupación repentina de tu pareja por mejorar el aspecto físico.
• aumentan las ausencias en la casa por culpa del trabajo. Los horarios más prolongados o los viajes más largos se multiplican.
• se interesa excesivamente en que usted haga algún viaje o se entretenga con algo, quizás con el fin de conseguir mayor libertad de acción.
• se dan cambios en los hábitos sexuales de la pareja.
• aparecen las clásicas huellas del amor furtivo: perfumes desconocidos, manchas de cosméticos o la aparición de facturas con gastos extraños de hoteles o restaurantes.

¿Por qué un hombre o una mujer son infieles?, es sin duda la sumatoria de varias cosas. Pero puede decirse que hay huecos en la pareja que se compensan con la relación nueva. Para que el otro no busque afuera lo que le falta en su casa, debe sentirse correspondido en su amor, respetado, contenido y apasionado.

Algunas claves para mantener la pareja en buen estado son:

• Más sanos con menos celos. A pesar de que un poco de celos nunca vienen mal, las escenas desmedidas y sin motivo suelen ser una carga difícil de soportar.

• Saber diferenciarse. Recordar que la pareja no es un ser simbiótico y que cada uno tiene proyectos individuales.

• Propiciar el diálogo. Es necesario conversar en el momento adecuado. Hablando de los temas cuando van apareciendo, impide acumular insatisfacciones y rencores que exploten más tarde, cuando ya ni se sabe cual era el motivo de discusión.

• Bajar la idealización de la pareja. Saber que dentro de una vida feliz conviven momentos plenos y otros que los opacan, es importante para no decepcionarse ni esperar siempre más de lo posible. Hay que bajar la exigencia para permitirnos más felicidad y menos estructuración.

• Ser flexible. El intercambio de roles en la pareja hace que cada uno obtenga lo que necesita en su momento, sin estereotipos.

• Hacerse tiempo para escapadas con amigos. Quien no se separa, aunque sea brevemente, no se extraña ni siente la necesidad de volver a ver al otro.

• Fomentar la buena intimidad. Hay que crear climas armónicos que propicien un encuentro placentero. Antes de que las dificultades absorban todo el espacio de la pareja, hay que preparar y motivar concientemente el clima íntimo. Es cierto que la espontaneidad es una condición infaltable para el sexo, pero que los primeros minutos sean "intencionales" no le quita frescura al encuentro.

• Dejar de ser padres por un rato. Antes que padres, hermanos, socios, empleados o hijos, ustedes son un hombre y una mujer. Esto se pierde de vista, muchas veces, con la llegada de los hijos.

• Organizar actividades y salidas. Ir al cine, a caminar, a una exposición, a bailar, a un hotel o adónde quieran, pero solos, es muy importante para la pareja. Además de las salidas familiares, hay que darse lugar para arrumacos, besos, caricias y otro tipo de charlas.

• Negociar. Y para esto vuelve a ser básica la charla. Es mejor negociar y tener buen humor, poder reírse, incluso, de las situaciones límites que le suceden a uno mismo.

Muy buenos consejos, la verdad es que hay mucha gente muy fastidiada por estos temas. La clave en mi opinión, y basándome en mi experiencia, son los celos, como muy bien dices. Me encantó el artículo, lo citaré en mi blog: