El balón gástrico: método no quirúrgico para perder peso

El balón gástrico para perder peso no se trata de una cirugía invasiva y es el procedimiento bariátrico más simple. Se trata de un globo de siliconas inflable, se coloca en el estómago para reducir la capacidad de recibir alimentos y se ubica en un lugar donde estimula el centro cerebral de la saciedad. El balón se introduce a través de la boca y se lo pasa por el tubo digestivo hasta llegar al estómago donde permanecerá alojado por aproximadamente 6 meses, sin necesidad de cortes ni suturas. Una vez inflado, el balón flota libremente dentro del estómago ocupando entre un tercio y la mitad del estómago, de esta manera reduce la capacidad de incorporar alimentos y, además, estimula el centro cerebral de la saciedad. El uso del balón gástrico debe combinarse con una dieta alimenticia y con actividad física.

Colocación del balón gástrico

Previo a la colocación del balón, el médico debe realizar un cuidadoso examen del estómago a través de una cámara endoscópica para verificar que no existen anomalías. Si todo está como debe ser, el balón desinflado es introducido por la boca mediante un tubo flexible que permite que se lo ubique en el estómago. Para ello habrá anestesiar localmente la zona de la garganta y habrá administrado al paciente algún sedante suave que no llega a dormirlo completamente. Una vez que el balón se encuentra en el estómago, se lo llena con 600 a 700 ml de solución salina azul, por si hubiera alguna pérdida de líquido que sea detectado en la orina por su color. Una vez inflado y en su lugar, el médico retira el tubo de plástico y una válvula de seguridad se cierra automáticamente para evitar pérdidas del líquido. Este procedimiento no requiere internación y lleva solamente 15 minutos. Se aconseja reposo durante los dos días posteriores a su colocación.

El balón gástrico no produce dolor y en general permite continuar con la rutina diaria sin molestias. Es posible que provoque náuseas y vómitos durante los primeros días y tal vez dolor en el estómago o reflujo gastroesofágico, pero esos síntomas se tratan con la debida medicación que indicará el profesional.

En qué casos se recomienda el uso del balón gástrico

El balón fue pensado como una ayuda para perder peso en aquellas personas cuyo IMC es de 30 a 40, y al igual que el resto de las prácticas quirúrgicas, no han tenido éxito con los planes de adelgazamiento tradicionales. Algunas personas lo utilizan como una medida previa a otra cirugía de la obesidad.

No se recomienda su uso en personas con sobrepeso leve o moderado, en personas con que padecen alguna enfermedad gástrica o intestinal, en pacientes con hernia hiatal, ni en aquellas personas que presentan alguna anomalía estructural en el esófago o la laringe, como un estrechamiento o inflamación anormal (divertículos). Tampoco es recomendable en personas que ingieren corticoides, anticoagulantes u otros irritantes gástricos, ni en mujeres embarazadas o en período de lactancia. En cambio puede ser utilizado por personas con IMC mayor a 30 que no pueden someterse a una cirugía bariátrica, o en aquellas que necesitan reducir el riesgo quirúrgico.

Por cuánto tiempo se puede usar el balón gástrico

Generalmente se lo utiliza por un período de 6 meses, es el tiempo que puede resistir el material del balón ante la acción de los jugos gástricos. Mientras se lo use, el médico recetará una medicación que inhibe la secreción ácida del estómago para evitar posibles úlceras a causa del roce. En algunos casos, y solo si el médico lo recomienda, una vez retirado el balón se puede colocar otro transcurridos 45 días. Para quitar el balón del estómago una vez que ha pasado su período útil, el médico lo pincha utilizando una aguja que es transportada hasta el estómago con un tubo de plástico, drena el líquido por el mismo tubo para desinflar el balón y lo retira por la boca, de la misma forma en que lo colocó y bajo sedación del paciente.

Efectividad del balón gástrico

En pacientes con sobrepeso importante permite lograr mejores resultados que las dietas y el ejercicio. Generalmente se logra una reducción de entre 15 y 25 kilos y en casos de obesidad grave se puede comenzar por el balón para luego pasar a una cirugía bariátrica del tipo bypass gástrico. Al ser una ayuda temporaria para perder peso, el mantenimiento del peso logrado con su uso depende exclusivamente del paciente. Es importante durante el período de su uso, que la persona aprenda hábitos alimentarios y de actividad física que le permitan mantener su peso luego de retirado el balón.

Ventajas del balón gástrico

El balón gástrico brinda sensación de saciedad, permite bajar de peso en mayor porcentaje que las dietas y el ejercicio físico, es más económico que el resto de los procedimientos bariátricos, puede retirarse si el paciente lo desea o si se presenta alguna complicación, tiene bajo nivel de riesgo, sirve como preparación para pacientes que quieran experimentar cómo es la vida con un método restrictivo antes de realizarse una cirugía bariátrica y ayuda a reducir el riesgo en pacientes con mucho sobrepeso que deben someterse a una operación.

Categoría: Cirugías para perder peso

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