Seguimiento-control evolutivo de un bebedor excesivo

El seguimiento de un bebedor excesivo por parte del equipo de atención primaria constituye un componente decisivo de las intervenciones de breve intensidad en atención primaria. El número de visitas realizadas durante el seguimiento guarda relación con unos mejores resultados. El momento para realizar el seguimiento viene marcado por los objetivos conductuales.

El refuerzo (material, verbal o emocional) de los logros del paciente debe hacerse mientras dura la motivación para el cambio. El envio de una carta, una llamada telefónica, una conversación aprovechando contactos esporádicos, etc. pueden ser útiles para recordar o reforzar los objetivos pactados.
El control evolutivo permite al médico y al paciente determinar si el plan de cambio es útil, si funciona o si aparecen problemas. En el marco de una nueva entrevista pueden negociarse nuevos objetivos o revisar los existentes.
El control periódico de los marcadores biológicos de consumo de alcohol pueden servirnos para reforzar positivamente los resultados del paciente. Algunos autores emplean un diario de autorregistro del consumo, donde el su jeto va anotando algunas características asociados a su patrón de consumo, que posteriormente se pueden comentar con el consejero.

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